Están en una época muy difícil, en ese camino entre la niñez y la adolescencia. Con los años cambian su personalidad y es probable que la decoración de su dormitorio les resulte demasiado infantil o no se amolde a sus gustos y personalidad.
10 claves para elegir bien
- Estética: Las cortinas pueden llegar a transformar completamente el aspecto del dormitorio. Escoge un modelo que combine perfectamente con el resto de la decoración.
- Colores claros: Si en la decoración del dormitorio predominan los muebles, paredes y ropa de cama colorida, lo mejor es que elijas unas cortinas lisas en colores pastel o claros.
- Colores fuertes: Las cortinas de tonos saturados son perfectas para poner un poco de acento en dormitorios monocromáticos.
- A cuadros: Todo un clásico. Antes era muy común usar un mismo estampado y tela para las cortinas, la ropa de cama y el tapizado de las butacas.
- Mezclar estampados: Ahora ya no se lleva decorar con un solo patrón, por lo que puedes atreverte a combinar estampados o telas con la misma gama cromática.
- Medidas: Si debajo de tu ventana hay algún mueble, es mejor que elijas una cortina corta.
- Luminosidad: Es muy importante que la cortina no impida la entrada de luz natural, sobre todo, si la habitación es pequeña.
- Temática: Cada adolescente es diferente, pero todos ellos hacen de su dormitorio su templo. Averigua las aficiones de tus hijos.
- Ciudades: Para los dormitorios de los jóvenes modernos y cosmopolitas existen cortinas con símbolos representativos de grandes urbes como Londres, Nueva York o Madrid.
- Animal print: Algunas personas consideran que este estilo es excesivo para dormitorios infantiles o adolescentes. Para rebajar la intensidad de los estampados se suele combinar con lisos y tonos neutros.
¿Decorarías con cortinas un dormitorio adolescente o prefieres los estores?