El teletrabajo ha ganado la batalla en muchos hogares, extendiéndose más allá de la pandemia. Para todos aquellos que pueden realizar su actividad laboral desde casa supone todo un respiro, puesto que permite una mayor conciliación familiar y, desde luego, lleva aparejadas una serie de ventajas, como la de ganar tranquilidad y marcar tus propios ritmos.
Ahora bien, esto puede ser un arma de doble filo, dado que es más fácil de lo que piensas relajarse y que tu productividad se vea seriamente afectada. Con un poco de disciplina y regularidad es fácil adquirir unos hábitos que mantendrán tu nivel de concentración al máximo nivel.
1. Cuida tu puesto de trabajo
Podrías pensar que al estar en casa puedes trabajar en cualquier sitio. No sería mala idea buscar en cada momento la mejor iluminación natural, o simplemente el rincón más tranquilo. Sin embargo, habilitar un lugar específico de trabajo es importante a la hora de saber en todo momento dónde tienes todo lo necesario para tu actividad laboral.
También evitarás accidentes o pérdida de algún material. Elige la parte de tu casa que reúna las mejores condiciones. Todo esto no quita para que un día decidas bajar a la biblioteca o la cafetería para trabajar en un ambiente diferente.
2. Planifica el trabajo de la semana
Como primer paso, planificar tu actividad laboral de la semana es primordial. Agendar tus tareas significa tener una guía que deberás seguir lo más estrechamente posible. De esta manera, el tiempo estará mucho mejor administrado, tanto el que dediques a tu jornada laboral como el tuyo propio. Si tienes que ocuparte de tus hijos, esta forma de organizarte te habrá ayudado a no descuidar ni un solo minuto con ellos.
3. Aparca las redes sociales
Si no hay nadie que te controle directamente te será muy tentador visitar tus redes sociales. Un descanso no viene nunca mal y puedes distraerte con ellas, pero debes evitar procrastinar y perder un montón de tiempo. Si paras para descansar, tómate un café o un refresco, sal a la terraza o baja a la calle a pasear. Estos son los mejores métodos para relajarse y retomar el trabajo otra vez con energías renovadas.
4. Madruga para empezar
Después de una noche de descanso, habiendo dormido las horas suficientes, somos mucho más productivos. Levántate temprano, tómate un café o un té y comienza a trabajar. Evita hacer un desayuno demasiado copioso. Puedes parar a lo largo de la mañana para almorzar algo, pero siempre entra pereza cuando estiramos demasiado el desayuno y por consiguiente, la productividad disminuirá.
5. Tu vida social puede esperar
Otra gran tentación es la de aprovechar una pausa para hacer una llamada a algún familiar o amigo que hace tiempo queremos hacer. Esto conlleva en muchas ocasiones pasarnos mucho rato al teléfono. Después de una llamada larga habrás perdido el hilo de lo que estabas haciendo y la concentración. Te llevará un buen rato volver a retomar la tarea y supondrá más tiempo perdido que deberás recuperar.
6. Interacciona con tus compañeros
El teletrabajo también lleva aparejada una gran dosis de soledad. Normalmente, a lo largo del día y de la jornada laboral estarás solo. Pero eso no quiere decir que no puedas interactuar con tus compañeros. Las reuniones a través de diferentes apps te mantendrán comunicado con ellos de forma regular.
7. Un entorno que te relaje
Busca elementos que puedan mantenerte, a la vez que concentrado en el trabajo, también relajado. La música puede ser un buen hilo de fondo durante el trabajo, aunque para los colores. Hay a quien le resulta imposible trabajar con música o pequeños ruidos que le distraigan. También los olores o una decoración alegre te pueden ayudar a sentirte más cómodo mientras trabajas.
8. Cocina el día anterior
La hora de la comida es sagrada, por eso, si quieres aprovechar al máximo ese momento, te recomendamos que cocines el día anterior después de la jornada laboral. Así podrás comer con calma, sin el agobio de tener que preparar algo y también decidir en que momento vuelves a la carga. Manteniendo una dieta equilibrada no correrás el riesgo de sentir pesadez tras una comida copiosa que te hará cuesta arriba las últimas horas de trabajo.
9. Fijarte pequeñas metas
La motivación es otro componente clave para realizar el teletrabajo con estímulo. Fíjate pequeñas metas razonables que puedas alcanzar con éxito. Esto te ayudará a sentirte realizado, conseguir fuerza de voluntad y mucho ánimo que te harán aumentar la productividad. Estas metas a corto plazo también te harán sentirte orgulloso de tus logros.
10. Levántate y haz estiramientos
Hacer pausas para estirar los músculos es tan importante como el trabajo mismo. No sirve de nada tratar de quitarse las tareas del tirón porque a la larga la mente se resiente y llega invariablemente el cansancio. Para cuando lo estimes oportuno para mover un poco el cuello, los brazos y las piernas, y de paso, replantearte el trabajo pendiente.
