Cuando buscamos vivienda en los portales inmobiliarios, lo primero que hacemos es mirar las fotografías. Pero todo nuestro interés se frustra cuando lo que aparece son imágenes descuidadas que no invitan a visitar la vivienda. La fotografía inmobiliaria tiene que cumplir unas cualidades para conseguir captar la atención de los compradores. Sin embargo, en la mayoría de los anuncios que se publican en los portales inmobiliarios, las fotografías son tomadas por el particular o agente inmobiliario con un móvil.
“Toda foto inmobiliaria debe describir la distribución y las calidades de la vivienda, ser tomada a velocidad de obturación baja y con trípode, la escena debe estar preparada y la hora del día a la que se toma la foto es clave para conseguir buenos resultados”, destaca como principales características de la fotografía inmobiliaria, Anna García, fotógrafa y home stager en Espai Interior.
Aspectos básicos de la fotografía inmobiliaria
Para hacer fotos atractivas y que la vivienda “entre por los ojos” hay que tener en cuenta:
- La luz como factor esencial
No deben tomarse las fotos en las horas de mayor diferencia de exposición entre el interior y el exterior. “La primera hora de la mañana o la última de la tarde, antes de anochecer, nos ofrecen una luz más adecuada para conseguir un equilibrio”, aconseja David DeCal, fotógrafo de Studio D Cal. Incluso se pueden encender luces interiores artificiales si la vivienda es oscura pero mejor si son indirectas.
- Colocarse en la esquina para captar más espacio
Las cámaras compactas o los teléfonos móviles no tienen ópticas de gran angular que abarcan más superficie. Para suplir esa carencia, en Studio D Cal recomiendan “colocarse en la esquina de la habitación y apuntar a la otra esquina en la diagonal mayor para recoger el máximo espacio en la imagen”.
- Disparar a la altura del pecho
La posición idónea de la cámara a la hora de disparar no es necesariamente a la altura de los ojos, como generalmente se utiliza, según DeCal “suele quedar mejor el encuadre situando la cámara a la altura del pecho, salvo si son espacios con techos muy altos o a doble altura”.
- No utilizar flash
Si se dispara con flash se genera una luz poco favorecedora. Además, hay que evitar que queden reflejados los fogonazos del flash en los espejos o superficies brillantes de la habitación.
- Habitaciones limpias y despersonalizadas
Es fundamental que todas las estancias estén bien recogidas, que no tengan desperfectos a la vista ni tampoco muchos muebles y trastos por medio. Cuanto más despersonalizadas y vacías aparezcan, mejor.
