Si estás pensando en poner una librería en tu salón pero no tienes mucho espacio, la idea de un mueble empotrado es bastante factible. Aprovecha las esquinas o los espacios muertos creando este rincón de lectura que le dé mayor personalidad a tu espacio.
6 formas de organizar los libros en el salón
- Lo más recomendable, por comodidad, es posicionar todas las baldas al alcance de la mano, tanto de altura como de fondo, y si no es así nos vendrá bien un apoyo para poder subirnos.
- Otro punto a tener en cuenta es el grosor de cada soporte, puesto que será mayor o menor dependiendo del peso que lleve. Si no quieres que quede muy tosco, con un modelo de uno o dos centímetros es suficiente.
- La manera más sencilla de crear una librería empotrada es teniendo en cuenta siempre las áreas desaprovechadas. Es decir, si tenemos una pared con diversos niveles, podemos usar ese espacio que se crea para instalar una serie de piezas que sirvan para hacernos una pequeña biblioteca y dar así un toque de lo más interesante.
- El material más utilizado es la madera. Es muy resistente y flexible a la hora de combinar, ya que puedes elegir los colores que más peguen con el resto de la habitación.
- Normalmente la estructura del mueble es rectilínea, pero también hay otras opciones para innovar y dar dinamismo al ambiente con curvas añadidas o formas geométricas de lo más originales.
- Por otro lado, si no existe ese desnivel siempre puedes crear los huecos haciendo una pequeña obra. La mayor ventaja de esto es que no hace falta comprar un mueble, aunque sí que es necesario poner baldas de refuerzo. Y, si nos apetece tener una iluminación especial, unas pequeñas luces LED en la parte de arriba de cada sección aportan una atmósfera mágica muy apetecible.
¿Qué te parecería tener una librería empotrada? ¿Te animas a incluir una en tu salón?
