El Banco de Canadá ha advertido del riesgo de una burbuja inmobiliaria en algunas ciudades del país. En esta línea, ha hecho referencia al aumento del costo de la vivienda no es sostenible, ya que los precios han crecido hasta un 30% desde el inicio de la pandemia. En estos momentos, el porcentaje de nuevas hipotecas con una relación entre préstamo e ingresos por encima del 450%, se sitúa en el 22%.
Esa cifra es superior a la que existía en el país antes de que, en 2016, las autoridades canadienses impusiesen normas más estrictas para reducir los préstamos de alto riesgo. El regulador financiero ha defendido que, dado el elevado número de hogares que dedican una parte sustancial de sus ingresos a pagar hipotecas, cualquier problema en la economía afectaría la capacidad de muchos canadienses, para hacer frente a sus cuotas mensuales.
Redacción/pisos.com
