Vale que la combinación de blanco y negro da como resultado un ambiente moderno y elegante, pero a la larga puede parecernos un poco aburrido. ¿Qué tal si le damos un poco de color? Olvidaros de la pintura, se puede dar colorido de muchas otras maneras.
Sólo necesitamos elementos decorativos muy coloridos que no requieran de grandes complicaciones a la hora de incorporarlos. En este caso hemos elegido el verde eléctrico y hemos comenzado por elegirlo en adhesivos de vinilo. Necesitaremos rollos de adhesivos vinílicos de diferentes tonalidades, una regla, unas tijeras o cúter y un lapicero para realizar las guías.
Recortaremos primero unos rectángulos del tamaño de las puertas de nuestros muebles. Usaremos un metro para ajustar las medidas. Aún así, mejor pasarse que quedarse cortos, porque una vez pegado, podemos perfeccionar. Colocaremos, cuidadosamente y sin dejar arrugas o burbujitas, el adhesivo, forrando el exterior de las puertas, ayudándonos de un paño para ir alisando sin romperlo.
Ahora viene el paso que requerirá de mayor paciencia y dedicación. Con adhesivos de diferentes tonalidades de verde, o algún color que combine, como el amarillo limón, iremos recortando finas cintas que iremos alternando sobre la base verde ya pegada.
Procura hacerlo con tiempo y cuidado. Puedes recortar cintas de diferentes grosores y así crear un dibujo particular. Tendrás que guiarte con especial medición para que las cintas se coloquen a la misma altura en todas las puertas.
Te recomiendo que trabajes sobre las puertas de los muebles desinstaladas de su lugar para realizar la tarea lo más cómodamente posible. Con este toque de color darás al salón un aire nuevo y fresco y, sobre todo, muy alegre. Completarás el estupendo ambiente añadiendo algún complemento en el mismo tono que los adhesivos pero sin que le quite el protagonismo a nuestra obra de arte. Puesto que hemos elegido el verde, una planta de hojas anchas y verde fuerte será el elemento más acorde. Yo voto por un helecho.
Ya has visto que nuestro salón puede recobrar vida con un simple toque personal y artístico como este. Puedes jugar con las formas geométricas y optar por círculos en vez de rayas o por algún dibujo de plantilla que de un aire original a vuestros muebles. Luego integra algún complemento decorativo como cuadros, jarrones o algún textil del mismo estilo y ¡voila! ahí tienes un salón renovado y distinto al resto.
