Ahora que los fondos ‘buitre’ están empezando a realizar operaciones de compraventa de pisos en España, puede que se conviertan en los nuevos acreedores de muchos hipotecados. No obstante, existe una posibilidad de recuperar la vivienda recurriendo a una brecha en la legislación española: el derecho de retracto. Este punto recogido en el artículo 1535 del Código Civil permite al titular de la deuda adquirir el inmueble con las mismas condiciones estipuladas en el contrato, en el lugar del tercer adquirente por compra o dación en pago.
Sin embargo, para recurrir a esta brecha legal se deben cumplir algunos requisitos. El crédito debe ser litigioso, según advierte Mercé Caral, socia del despacho Jausas Legal, esto es, que el deudor y acreedor se hayan enfrentado los juzgados por el mismo. La otra exigencia es que se recurra a este derecho en un plazo máximo de nueve días naturales desde que el nuevo acreedor -el fondo ‘buitre’- reclame la deuda. Cuando el fondo de inversión suele hacerse con el piso envía una notificación a los morosos exigiendo una deuda mucho mayor que la anterior que suele estar a nombre de una empresa intermediaria de recobro para hacer la gestión.
