Un estudio de Century21 revela que la compra de una vivienda sale más a cuenta que el alquiler. En concreto, del documento se desprende que en ninguna provincia española la tasa de esfuerzo de las familias españolas para adquirir una residencia supera el 33% de sus ingresos. Esta situación no se produce en el mercado del alquiler.
Especialmente negativo es el contexto que atraviesa el arrendamiento en el centro de ciudades como Madrid y Barcelona, donde la tasa de esfuerzo requerida es mucho mayor. Asimismo, y según esta compañía, en el caso de que una familia destinara ese 33% de los ingresos a la compra de una vivienda, en la mayoría de ciudades españolas sería posible adquirir más metros cuadrados que los que permite el alquiler de una vivienda similar.