Según Anida, el 66% de los compradores potenciales de una segunda vivienda en la costa de España prefiere un piso, frente al 32% que se decanta por un chalet. Los motivos justificados por los clientes han sido la comodidad y la practicidad de este tipo de inmueble.
La mayoría está dispuesto a invertir hasta 100.000 euros en adquirir una segunda residencia en la costa. En cuanto a capacidad, el 48% se inclinó por una casa con dos habitaciones, mientras que el 33% prefería una casa con tres dormitorios. El 76% de los participantes indicaron que su entorno preferido se sitúa próximo a la playa.