La situación inmobiliaria en los Estados Unidos es un buen anticipo de lo que puede ser el devenir del resto de los países desarrollados en un tiempo. El precio de la vivienda en el país norteamericano se incrementó un 2,9% en el segundo trimestre con respecto al primer trimestre de año, lo que supone el primer crecimiento trimestral en tres años, según el índice Case-Shiller de Standard & Poors (S&P). Además, los precios aumentaron en el mes de junio un 1,4%, lo que supone la segunda subida mensual consecutiva.
Los datos apuntan a una más que probable estabilización del mercado inmobiliario estadounidense. Pese a ello, en términos interanuales, los precios siguen registrando abultados retrocesos, con un descenso del 15,4% con respecto al pasado año. Las ciudades que mostraron los mayores incrementos mensuales de precios fueron Cleveland, San Francisco y Minneapolis. Sólo Detroit y Las Vegas registraron descensos de precios en junio.
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