Francia ha anunciado que durante cinco años experimentará la limitación del precio de los alquileres. En concreto, desde el Gobierno nacional se ha propuesto a aquellas ciudades que quieran acogerse la limitación de las subidas del precio de los arrendamientos a un 20% sobre un precio medio. Este se determinará según zona, año de construcción, calidades o número de habitaciones.
Otra de las medidas que se llevarán a cabo es la penalización con 5.000 euros a aquellas personas físicas que incumplan la ley y con 15.000 euros si son empresas o sociedades. Esta decisión llega después de que Francia haya sufrido un movimiento de capitales que ha generado importantes subidas de precios. De hecho, París se ha situado como la ciudad más cara de Europa para vivir de alquiler.
