¿Tienes ganas de más?
Suscríbete a nuestra news para recibir recomendaciones, guías y temas de actualidad
Agente 3.0

Emprender en el sector inmobiliario 


El sector inmobiliario ha sido y sigue siendo uno de los principales motores de nuestra economía. Dentro de sus innumerables actividades, se cuentan las agencias inmobiliarias, empresas dedicada a la compraventa de inmuebles, edificios o propiedades que pueden destinarse a vivienda, pero también ser enclaves para negocios. 

Las agencias inmobiliarias se encargan de gestionar estas propiedades y de asesorar a los clientes que quieren comprar, vender o alquilar al principio, durante y hasta el final de las transacciones que realicen. Sin embargo, las agencias no son la única opción que tienen aquellos que quieren desarrollar su profesión en el sector inmobiliario. 

Intermediación: un camino lleno de retos

Es cierto que durante muchos años, los agentes inmobiliarios (aquellos que emprenden o trabajan en agencias) no han contado, generalmente, con la simpatía de la sociedad. La burbuja inmobiliaria que estalló en 2008 contribuyó a solidificar una imagen infundada sobre los agentes inmobiliarios, señalados demasiadas veces por ser poco honestos o incluso aprovechados.

A esto hay que sumar otra cuestión: los clientes que hoy participan en el mercado inmobiliario están más informados que nunca. Leen habitualmente artículos que hablan sobre tendencias, conocen algunos trucos para vender más rápido e incluso tienen acceso a guías con información básica sobre aquello que hay que saber antes de comprar. 

Esto les ofrece una falsa seguridad y muchos creen que, a pesar de no ser expertos, pueden realizar cualquier transacción por sí mismos, sin contar con la ayuda de nadie y ahorrándose, claro está, los honorarios de un profesional inmobiliario. Los negocios que hoy abren sus puertas en el sector o que siguen resistiendo desde hace tiempo saben que tienen que lidiar con estos obstáculos. 

La manera más efectiva de hacerlo y convertirte en un agente inmobiliario de éxito es diferenciándose de la competencia. Y para ello tienes que observar las prácticas de los demás, aprovechar aquellas que pueden servirte para destacar y ofrecer servicios de valor añadido. Con esto, los clientes se darán cuenta de lo genial que será contar con un profesional experto que pueda asesorarlos y acompañarlos en todas las fases de la operación inmobiliaria. 

¿Cómo es el día a día de un agente?

La mayor parte de profesionales que trabajan en el sector lo hacen como agentes inmobiliarios. Tradicionalmente, pensamos que las personas que se dedican a este trabajo se encargan de vender viviendas y así es, en parte. Aunque esta no es su única responsabilidad. 

Los agentes inmobiliarios proporcionan asesoramiento y actúan como mediadores en operaciones inmobiliarias, ya sea de compraventa, alquiler, permuta o cesión de inmuebles. Estas son solo algunas de las funciones o tareas que pueden llegar a desempeñar: 

  • Prospección y captación inmobiliaria  
  • Publicación y gestión de anuncios 
  • Reportajes fotográficos o de vídeo 
  • Acciones de home staging 
  • Visitas inmobiliarias físicas
  • Visitas o tours virtuales 
  • Atención, gestión y asesoramiento a clientes 
  • Resolución de incidencias 
  • Negociación y gestión de objeciones de clientes 
  • Redacción de contratos 
  • Gestión de documentación (registro, notaría, impuestos)

Todas estas tareas tienen que estar apoyadas en habilidades, herramientas y conocimientos que son clave para desempeñar cada una de estas funciones con garantías. De este modo, por ejemplo, es imprescindible que para gestionar todo lo relacionado con la documentación del inmueble, el agente inmobiliario tenga conocimientos acerca de los requerimientos legales, así como de todos aquellos pasos que legalmente deben darse en el acto de compraventa de un inmueble. 

Del mismo modo son necesarias habilidades en el campo de la negociación, agilidad para resolver incidencias, conocimientos técnicos para utilizar un CRM inmobiliario o realizar sesiones fotográficas con resultados de calidad. 

¡Quiero ser agente inmobiliario!

Si has llegado hasta aquí seguramente sea porque tienes claro que quieres emprender en el sector inmobiliario, así que vamos a darte algunos tips que nos parecen indispensables:

Fórmate

No es una obligación, pero sí una responsabilidad. Estudia todos aquellos temas vinculados al sector inmobiliario que debes conocer a fondo: legislación, economía, marketing… Solo de este modo podrás ofrecer un servicio diferencial y a tus clientes no les quedará otro remedio que reconocer que tú eres quien debe vender su casa.

Infórmate

Estar al día sobre la actualidad económica e inmobiliaria, las tendencias y las nuevas normativas es imprescindible si lo que quieres es que los clientes confíen en ti y en tu asesoramiento. Ve a fuentes expertas y mantente al día de los principales indicadores (INE, Colegio de Registradores, Consejo General del Notariado).

Fíjate en los mejores

Hay otras personas que recorrieron este mismo camino antes que tú. Esto no significa que tengas que copiar sus ideas o calcar sus modelos de negocio. Lo que tienes que hacer es fijarte en aquello que les ha funcionado, aplicarlo y si, cabe, mejorarlo. 

Centra tus objetivos

Asegúrate de tener muy claro cuál es tu modelo de negocio a la hora de emprender en el sector inmobiliario. ¿Vas a centrarte en el alquiler? ¿Estás pensando en un modelo exclusivo para gestionar inmuebles comerciales? Sé claro y lánzate a por todas.   

Adáptate al entorno

Es inevitable que con el tiempo se produzcan cambios importantes que exigen de nosotros una alta capacidad para adaptarnos. En los últimos años, todos los negocios han tenido que hacer un esfuerzo enorme para digitalizarse. Y esta es solo una de las tareas pendientes. Adaptarse para crecer es la única vía. 

Dime qué otras opciones tengo

Abrir las puertas de un nuevo negocio inmobiliario es una opción perfectamente válida y exigirá de ti un gran esfuerzo en múltiples aspectos. Sin embargo, hay muchas otras vías con las que puedes emprender en el sector. 

Abrir una inmobiliaria a través de una franquicia

Esta es una opción que presenta muchas ventajas, porque te ofrece la posibilidad de no tener que empezar de cero, sino de integrarte en un negocio que ya está consolidado.

Contarás con el aval de una marca muy conocida en el mercado y con todas las opciones de formación, respaldo económico y tecnológico. Es cierto que no tendrás tanta libertad operativa, pero para empezar quizá te resulte todo bastante más fácil que si vas por libre.

Más allá de la agencia inmobiliaria

No todas las empresas del sector inmobiliario se dedican a la gestión de inmuebles. Si tienes experiencia en interiorismo, tal vez te interese abrir una agencia de home staging o, si tienes grandes habilidades fotográficas, tal vez puedas realizar reportajes de foto o vídeo para agencias. 

La gestión de patrimonio

Otra vía interesante es la gestión de patrimonio. Las personas o empresas que tienen muchos inmuebles en propiedad necesitan la mano de un experto para gestionar contratos de alquiler, comunicarse con los inquilinos, velar por el buen estado de conservación de las propiedades o buscar nuevas oportunidades de negocio. 

En el sector terciario

Otra manera de participar profesionalmente en el sector inmobiliario es a través de la búsqueda de espacios o solares aptos para la construcción. La escasez de vivienda juega de tu lado, porque es un momento importante para identificar espacios y buscar promotores que quieran apostar por la construcción de nuevos edificios de viviendas.

Y tú, ¿ya estás listo para emprender? 

Publicidad