La cláusula de vencimiento anticipado es el elemento que más diferencia a la nueva Ley hipotecaria respecto al resto de países de la Unión Europea. Esta medida permite al banco ejecutar el crédito ante los impagos del consumidor, desahuciar al propietario y adjudicarse el inmueble. En concreto, la medida permite desahuciar con nueve cuotas impagadas o el 2% de deuda.
Por su parte, en Alemania la ejecución llega tras dos cuotas impagadas que supongan el 2,5% del nominal de un préstamo hipotecario de hasta tres años concedido a un consumidor o un 5% si el crédito es de mayor duración. En el caso de Italia es posible desahuciar tras siete impagos. En países como Irlanda o Francia este aspecto no se encuentra regulado.