Jardines coloridos sin flores

Tener un jardín colorido y lleno de alegría no depende solo de tus plantas y flores. Puedes incluir un toque de color mediante otros  accesorios y materiales. Si no eres muy hábil para mantener las flores espléndidas durante todo el año, apuesta por complementos y técnicas de pintura para llenar de luz tu jardín.

Los colores intensos y las combinaciones llamativas alegrarán tu jardín incluso si no tiene muchas flores y plantas. Una buena opción es apostar por una combinación bicolor.

Los contrastes fuertes mediante complementos pequeños generan un efecto muy equilibrado. Atrévete con los tonos pero en accesorios más sutiles.

Los textiles de exterior son otra herramienta para colorear tu jardín. Si combinan con el tono de la pared conseguirás una atmósfera muy viva.

Elegir un tono base para todo el jardín es una apuesta fuerte pero sorprendente. El violeta es un color poco habitual en el jardín pero que combina perfectamente con los tonos naturales de las plantas.

Elegir un tono ácido para los complementos aportará mucho brillo a tu jardin. El fucsia es un color que además se puede encontrar en la naturaleza, por lo que puedes conseguir un interesante juego de colores.

Además de experimentar con el color, puedes hacerlo con las formas y siluetas. Inspiraté en las formas de la naturaleza y decora la pared de tu jardín.

Un mural combinando los tonos de la pared y los frutos naturales dotará de una atmósfera muy acogedora a tu jardín. Integraló junto a otras plantas para conseguir una sensación de volumen y realismo.

También puedes optar por imitar el césped en la pared. Incluso en secciones de tu jardín con desnivel en el suelo, como en las escaleras.

Imitar la silueta de tus árboles y jugar con los colores de la pared y el zócalo es una idea de sobresaliente. Además, puedes introduc tonos con contrastes fuertes mediante el mobiliario del jardín.