Un informe de BNP Paribas Real Estate sostiene que la inversión inmobiliaria en España el pasado año alcanzó su nivel máximo en una década. En conjunto, la inversión acumulada en 2018 alcanzó los 11.630 millones. Esta cifra representa un incremento del 8% en términos interanuales. A este resultado se han de sumar las operaciones corporativas con subyacente inmobiliario.

Las operaciones de los fondos de inversión supusieron el 61% del volumen total que se operó. En el conjunto, las SOCIMI también movieron un volumen importante, tanto como vendedoras como compradoras. Sin embargo, los datos no fueron idénticos en cada uno de los trimestres, ya que el impulso se produjo especialmente en el cuarto trimestre.