La comisión por la venta de una vivienda se ha situado tradicionalmente en el 3% del precio final si se trata de una vivienda nueva y en torno al 5% si la vivienda es de segunda mano. Según Juan Merodio, fundador de Nuik Inmobiliaria, "esta comisión, que no está regulada, varía según la comunidad autónoma y ha sufrido considerables subidas en los años en los que era más difícil vender una vivienda".
No obstante, apunta que desde 2017 se ha producido una liberalización de la comisión de los intermediarios inmobiliarios, la cual está provocando "una auténtica revolución en el sector". De hecho, sostiene que la mayor flexibilización ha derivado en que el mercado sea más ágil, el cual se ha convertido en un espacio "donde que el cliente puede acceder a un servicio profesional de calidad sin costes abusivos".
Redacción/pisos.com