El Ayuntamiento de Madrid busca un acuerdo con plataformas de alquiler vacacional para determinar una estancia máxima de días en las que estas viviendas pueden arrendarse al año. De igual modo, se está barajando la posibilidad de que en la ciudad se implante una tasa a este tipo de inmuebles. El objetivo de la medida es que no se monten negocios fuera de la actividad reglada.
Para arrendar viviendas de este modo, desde el consistorio han basado su estrategia en garantizar que solo quien sube la vivienda a la plataforma en cuestión es quien vive en ella. Desde el Ayuntamiento madrileño hacen hincapié en que esta oferta de alquiler ha pasado de representar el 2% el 2013 en todo el sector del alojamiento en Madrid a un 25%.