La región madrileña trabaja en una serie de modificaciones que remodelarán la actual normativa sobre suelo, que data del año 2001. La nueva Ley de suelo de la Comunidad de Madrid pretende permitir la flexibilización de los usos del suelo no protegido de la región y tiene como meta hacer posible que los espacios urbanizados puedan reconvertirse de forma sencilla y rápida, “en función de las cambiantes circunstancias que impone la demanda”.
Esta apuesta política por la reducción de la burocracia y la celeridad de los procesos constructivos ha sido bien recibida por los agentes del sector, como es el caso de Jesús Duque, vicepresidente de Alfa Inmobiliaria, quien considera que la propuesta puede tener consecuencias beneficiosas en el terreno económico, pues “la construcción y los servicios auxiliares representan un porcentaje elevado de empleo en esta comunidad” y tienen un efecto multiplicador en términos de PIB. ¿Qué aspectos claves rodean a la nueva normativa de suelo madrileña?
Uno de los mayores cambios que incorporaría la nueva Ley de suelo de la Comunidad de Madrid sería que la licencia de primera ocupación se podrá obtener mediante declaración responsable
Al igual que ya sucede en otras comunidades autónomas, como Murcia, Canarias, Andalucía, Aragón o Cataluña, la nueva legislación en materia de suelo de la Comunidad de Madrid permitirá obtener licencias de primera ocupación para promociones de vivienda a través de una declaración responsable. La medida ha sido valorada positivamente por Asprima, pues su director general, Daniel Cuervo, considera que con ella “se abarata el precio de las viviendas nuevas para los clientes, entregándolas antes que a día de hoy”.
Y es que desde esta asociación hacen hincapié en que, actualmente, el periodo medio de tramitación de licencias de primera ocupación en la Comunidad de Madrid es de tres meses. No obstante, otros expertos del sector, como Luis Corral, CEO de Foro Consultores Inmobiliarios, se muestran más cautos y defienden que se debe controlar “el punto débil de la medida”, evitando que se cometan irresponsabilidades en las declaraciones. “En caso de que esto ocurra, toda la casuística de obra mal ejecutada tendrá difícil subsanación a posteriori”, advierte.
La nueva normativa para la región madrileña tiene el objetivo de agilizar de las obras con escasa complejidad constructiva, de una sola planta y que no sean residenciales o públicas
En paralelo, la nueva normativa madrileña agilizará el comienzo de aquellas obras de escasa complejidad constructiva, que no tengan carácter residencial ni público y que se desarrollen en una sola planta. Una posibilidad, a juicio de Cuervo, que permite “mayor dinamismo y generación de trabajo” en la actividad de construcción “de obras menores”.
Sin embargo, Asprima diferencia estas licencias, “que no suponen una variación esencial de la estructura o de la volumetría”, de aquellas relativas a obra mayor y de nueva planta. Así, desde esta organización entienden que para estas últimas “los plazos de 12 meses de media que hay en la Comunidad de Madrid se deben reducir sensiblemente”. Al respecto, subrayan que la solución pasa por modernizar los parámetros de verificación y comprobación que realizan los técnicos en los proyectos presentados. También ponen como ejemplo la colaboración que están llevando a cabo, junto al Ayuntamiento de Madrid, para que estos trámites se reduzcan a menos de dos meses “con un programa informático que ayuda a los técnicos en su trabajo”.
Conceptos novedosos inspirados en entornos colaborativos, como el cohousing o el coworking, tendrán una definición legal en la nueva normativa con el fin de sacarlos del limbo administrativo
Los cambios que incluirá la Ley del suelo de la Comunidad de Madrid pasan por desarrollar una definición legal de conceptos como cohousing y coworking. En este sentido, Duque avanza que ambos términos son “muy novedosos en nuestro país”, aunque reconoce que “todo parece indicar que acabarán consolidándose como una forma más de propiedad o de uso del espacio” en España, al igual que ya se está produciendo en otros países de nuestro entorno.
Por su parte, el director general de Comprarcasa, Toni Expósito, añade que en los últimos años “han surgido estas figuras”, a las que, desde su punto de vista, “una legislación moderna y ágil, como la que se busca con esta nueva normativa, debe dar cabida”. Idéntica valoración realizan desde Foro Consultores Inmobiliarios, ya que consideran que tales conceptos “han venido para quedarse, por lo que debe iniciarse a la mayor brevedad posible una regulación que evite que estén en un limbo administrativo”.
Urge la armonización de la protección medioambiental con el crecimiento económico de la región con el fin de que Madrid continúe siendo un motor de desarrollo a nivel nacional
Otra de las claves de la futura renovada Ley del suelo madrileña, según Expósito, es la posibilidad de armonizar la protección medioambiental del espacio físico con el crecimiento económico de la región. Un equilibrio, apunta este experto, que resulta fundamental para que esta comunidad autónoma “pueda continuar siendo el motor de desarrollo económico a nivel nacional e internacional que es hoy”.
En esta línea, Corral argumenta que la normativa urbanística es compleja y pormenorizada, lo que lleva consigo la puesta en marcha de “muchos recursos para análisis y concesión”. De hecho, se muestra partidario a que se acorten los plazos, para lo que es necesario “dotar de servicios técnicos y humanos para que puedan hacerlo más rápido”.
La ley tendría como consecuencia un aumento de la oferta y una bajada de los precios, pero es necesario centralizar la política urbanística del país para tener una reglas del juego claras
La agilización de los procesos administrativos y la mayor flexibilidad en la concesión de licencias que aporta la modificación de la ley del suelo de la Comunidad de Madrid supone, en opinión de los expertos del sector, “una ayuda para resolver algunos de los problemas más acuciantes que tienen los madrileños”. En concreto, Expósito sostiene que la normativa proporcionaría una mayor oferta de vivienda, la cual “repercutiría directamente en los precios de la vivienda, evitando la continua subida de precios”.
Por su parte, Cuervo hace hincapié en que las medidas que incluye la reforma de la ley abaratarán el precio de las viviendas nuevas para los clientes “entregándolas antes”. No obstante, desde Asprima reclaman la puesta en marcha de “reglas claras en todo el territorio nacional, con los mismos conceptos y plazos”. “Sería una centralización de la política urbanística en toda España, aunque a nivel autonómico se tramitasen los aspectos de gestión para una mayor agilización en las actuaciones urbanísticas acordes a la realidad de cada región”, finaliza.