¿Pensando en comprar una vivienda unifamiliar? Esto es lo que debes saber

Seguro que tienes claro cómo es tu vivienda ideal. Con mucha probabilidad, en tus sueños aparece una casa espaciosa, luminosa, con jardín y piscina. Lo típico. Pero, si bien es cierto que la imaginación no tiene límites, no es menos cierto que muchos compradores españoles, en los últimos tiempos, se han inclinado por adquirir una vivienda unifamiliar.

En el caso de que te encuentres en esta tesitura, y estés pensando seriamente la posibilidad de comprar una casa unifamiliar, te aconsejamos que no dejes de leer este post. En él te mostramos todos los detalles que debes saber para tomar la decisión.

No es lo mismo una casa adosada, que una pareada o una aislada

Cuando hablamos de tipos de vivienda, con frecuencia se nos viene a la cabeza el binomio casa-piso. Esta diferenciación es real, como también lo es que existe una clasificación compuesta por varios tipos de viviendas unifamiliares, que podemos resumir en tres: adosada, pareada y aislada. Cada una de ellas son diferentes en lo relativo a elementos como los siguientes:

  • Número de paredes

La principal diferencia de este tipo de construcciones son el número de paredes compartidas con las casas vecinas. Así, en un adosado se comparten dos paredes, en un pareado una y en una vivienda aislada, ninguna.

  • Independencia y silencio

La proximidad vecinal explica el grado de independencia y silencio con el que cuenta cada una de estas viviendas, siendo la casa aislada la que más quietud ostenta, seguida de la pareada y de la adosada.

  • Ubicación

La situación de cada tipo de casa también condiciona su grado de autonomía y, con él, el hecho de que formen parte de urbanizaciones o, por el contrario, no dependan de otras en cuanto a zonas ajardinas y gastos comunes se refiere. Así, son las viviendas adosadas las que con mayor probabilidad se ubican dentro de una urbanización.

  • Amplitud

El hecho de ubicarse en una urbanización también determina que las casas adosadas cuenten con un terreno exterior de menor amplitud, puesto que dependen de un complejo, lo que no sucede con las viviendas aisladas ni con las pareadas.

  • Luz

De nuevo, el compartir paredes con los vecinos limita las casas adosadas. Esta vez, en lo que respecta al número de ventanas con las que cuentan, y con ellas, a la luz que obtienen. Ello se debe a que estas solo pueden ubicarse en la zona delantera y trasera de la vivienda, situación que no se producirá si compras una vivienda pareada, puesto que en ellas puede entrar luz lateral; y mucho menos en una aislada, en la que pueden colocarse ventanas en cada una de las paredes.

Ventajas de las viviendas unifamiliares

El recorrido que hemos realizado por los tipos de viviendas unifamiliares que existen te ha mostrado ya algunas de las ventajas que este tipo de inmueble presentan frente a los pisos. Igualmente, te habrá recordado varios beneficios que ya habías anotado, entre las que seguro que se encuentran los siguientes:

  • Espacio

El mercado inmobiliario es heterogéneo y hoy en día se construyen pisos muy amplios. Pero, por lo general, la superficie con la que se dota a una vivienda unifamiliar es notablemente mayor que la que registra un piso. Y lo mismo sucede con el número medio de habitaciones con las que dispone, algo que facilita la posibilidad modificar la distribución de la vivienda en función de cuáles sean las necesidades de quienes viven en ella a medida que pasa el tiempo.

  • Reformas

A diferencia de las viviendas plurifamiliares, comprar una casa te permitirá realizar mejoras y reformas sin tener que pedir permiso al resto de propietarios. Este mayor grado de independencia se traduce también en más tranquilidad e intimidad para los habitantes del inmueble, sobre todo, en el caso de las viviendas aisladas.

  • Exterior

Las viviendas unifamiliares disponen de espacios exteriores, lo que te permite llevar a cabo en ellas reuniones y actividades de ocio sin tener que utilizar, y con ello mantener con más facilidad, el resto de estancias de la casa.

  • Animales de compañía

Si bien en un piso se puede tener una mascota, en una casa no tendrás que sufrir las limitaciones que se presentan en una vivienda de menores dimensiones: desde el espacio en el que puede moverse el animal hasta el grado de molestias que se puede causar a los vecinos.

  • Ruido

Las viviendas unifamiliares proporcionan unos niveles de calma y armonía que difícilmente se pueden encontrar en un piso. Ya sea por las zonas exteriores que ofrece, por el menor número (o directamente ausencia) de vecinos o por su distancia de los grandes núcleos urbanos, se antojan como una posibilidad de residencia real para quienes buscan que su casa sea su lugar en el mundo: el sitio donde refugiarse del resto de la humanidad.

Inconvenientes de las viviendas unifamiliares

Las ventajas que ofrecen las casas unifamiliares son incuestionables, aunque no es oro todo lo que reluce en esta tipología de vivienda. Porque sí, existe una serie de inconvenientes asociados al hecho de vivir en una casa. Algunos de los contras que las deslucen son:

  • Precio

Es el primer indicador que nos viene a la cabeza. Efectivamente, por lo general, y si comparas aspectos comunes (como situación, superficie, número de dormitorios o calidades), el coste de una casa va a ser superior al de un piso. ¿El motivo? Hay varios hechos que explican esta situación, pero la menor oferta hace de ellas unas viviendas muy apetecibles para muchos compradores y ese interés se traduce en su revalorización monetaria.

  • Inseguridad

Aunque muchas viviendas unifamiliares, sobre todo las que se encuentran en urbanizaciones y aquellas que pertenecen a usuarios precavidos, cuentan con sistemas de seguridad, lo cierto es que las casas suelen ser un blanco más fácil para que los ladrones actúen en ellas. Esta problemática echa para atrás a determinados clientes, especialmente a aquellos que pasan mucho tiempo fuera de la vivienda.

  • Falta de servicios y comunicaciones

La situación en la que suelen ubicarse las viviendas unifamiliares hace que, en reiteradas ocasiones, estas cuenten con un ramillete de servicios más discreto que los pisos. Ya se trate de compradores jóvenes con hijos que tienen que ir a colegios, institutos o universidades o de clientes mayores que precisan acudir de cuando en cuando a hospitales, el alejamiento de las casas de los centros neurálgicos las convierte en un tipo de vivienda pensada para compradores independientes.

  • Más costes

Lo que unas veces es una ventaja, otras un inconveniente. En el caso de las viviendas unifamiliares, el mayor espacio con el que cuentan se traduce, también, en una limitación para sus dueños, que tienen que enfrentarse a mayores costes. Especialmente importante son los relativos a los consumos de la casa, tanto gas como luz y agua.

  • Alto nivel de mantenimiento

Todo hogar necesita un mantenimiento regular, pero hay consenso a la hora de reconocer que una casa independiente requiere un mayor nivel de implicación por parte de sus dueños, ya que este tipo de inmuebles son susceptibles de sufrir más desperfectos, y con mayor frecuencia, que un piso.

Unifamiliar en urbanización: ¿Sí o no?

Si la información que te hemos proporcionado más arriba te ha resultado útil para inclinarte por comprar una vivienda unifamiliar, es posible que aún te queden dudas sobre qué tipo de casa comprar. Muy significativa es la decisión en torno a la ubicación del inmueble y si este debería formar parte o no de una urbanización, ya se trate de un adosado, un pareado o de una casa aislada.  Por eso, te recomendamos que prestes atención a los elementos vinculados a toda urbanización, como:

  • Gastos de comunidad

El mantenimiento de una urbanización requiere de los aportes mensuales de sus propietarios. Este coste puede ser notablemente superior al de una comunidad de vecinos ubicada en un edificio, pues debe incluir gastos como: jardinero, servicio de seguridad, mantenimiento de zonas comunes, suministros, etc.

  • Piscina individual o comunitaria

Las casas que se ubican en urbanizaciones pueden ofrecer piscina comunitaria o no. El primer caso ofrece la ventaja de resultar más económica y menos trabajosa para el propietario. Por su parte, contar con piscina privada en tu casa te permite disfrutar de ella en cualquier momento, sin tener que dar explicaciones a nadie. Pero a un precio más elevado y teniendo tú que encargarte de su mantenimiento.

  • Garaje

La ubicación del garaje también puede cambiar en una urbanización, situándose este en una zona común, con otros coches de otros propietarios, o dentro del inmueble, como si de otra parte del mismo se tratara. Muchas adosadas tienen entrada independiente en la parte baja.

  • Relación con otros propietarios

Finalmente, las viviendas unifamiliares ubicadas en urbanizaciones obligan a mantener, necesariamente, relaciones con otros propietarios, ya sea para decidir asuntos que afectan a todas las partes, ya sea para tratar cuestiones bilaterales. Por eso, es importante que tengas en cuenta hasta qué punto quieres tener vecinos. Su cercanía puede resultarte incómoda en algunos aspectos, pero también es posible que surjan lazos de amistad entre vosotros y vivir en una comunidad de propietarios resulte una elección mucho menos arriesgada de lo que pensaste en un primer momento.

Publicidad
Suscríbete a nuestra news
y recibe la mejor info práctica, guías y actualidad