Es posible que el nombre de Freddy Mamani no te diga nada, pero en Bolivia es todo un símbolo. Este exalbañil reconvertido a arquitecto es el responsable de un tipo de arquitectura andina que ofende a los puristas y enamora a los visionarios. El barrio El Alto fue dejando atrás su carácter marginal para dar paso a una nueva burguesía que delegó en Mamani la construcción de sus mansiones. Con molduras de yeso pintadas con colores agresivos, las líneas y círculos que llenan fachadas e interiores recuerdan a Optimus Prime, el líder de los Autobots, en lucha continua contra los malvados Decepticons.
Redacción/pisos.com
