El Estudio de Paisajismo GM3, formado por los ingenieros forestales Miguel Moreno y Gonzalo Morillo y expertos en jardinería y paisajismo, se especializa en sacar lo mejor de la parcela de este chalet situado a las afueras de Madrid, en La Moraleja, una de las mejores zonas del municipio madrileño de Pozuelo de Alarcón. El proyecto, llamado ‘Naturaleza interior’, parte de un impresionante jardín vertical, que se compone de elementos modernos y tradicionales combinando materiales clásicos con tecnológicos.
Este vergel en altura desemboca en una piscina cristalina, que como describe su creador, se convierte en un estanque y nos sumerge en la naturaleza. No obstante, también se reserva un espacio para tomar el sol en unas tumbonas móviles de madera a juego con uno de los muros laterales también de este mismo material. Asimismo, después de un chapuzón, también proporciona un área para reposar y relajarse en superficies secas.
Como todo jardín con piscina privada, la presencia de la ducha es fundamental. En este caso, Moreno ha optado por un modelo exterior y al aire libre… sin barreras. La ducha entre la vegetación se integra en el entorno y se convierte en un placer. Además, al estar conectada al agua caliente de la vivienda, se puede utilizar los meses menos favorables.
El jardín vertical acompaña al agua en su frescor y la fuente integrada en la pared. Un pequeño chorro de agua sale desde este parterre y se vierte en la alberca renovando su contenido a modo de manantial natural. El continuo y relajante sonido de las aguas hará más realista este espacio y más placenteros los momentos de descanso y quietud.
Para el muro lateral derecho del jardín, la integración de madera le da un toque singular y transmite una sensación de calidez excepcional. La elección de la madera no es casual, sino que acerca el entorno natural a los que lo disfrutan. No obstante, este material no está en estado bruto, sino alterado tecnológicamente para que se adapte mejor al exterior y a las inclemencias del tiempo.
Todo este conjunto paisajístico se acompaña por una pequeña zona verde que acapara una discreta parte de la parcela con una plantación de Carex grayii. La elección de esta especie se ha escogido concienzudamente para aportar un aspecto más salvaje al jardín, separando los espacios con elegancia.
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