Su rico medio natural cuenta con áreas de grandes contrastes, como la zona volcánica de la Garrotxa, las montañas de los Pirineos y las playas de su magnífica costa. Su crecimiento económico en las últimas décadas se debe a la reestructuración de la industria, al desarrollo de un activo sector de servicios y de una excelente red de comunicaciones. En su rico patrimonio natural se puede disfrutar de espacios como el Parque Natural de Aiguamolls de L'Empordà, y en el plano artístico y cultural, el legado que dejó en este territorio las civilizaciones griega, romana y árabe, que ha configurado la atractiva personalidad de sus gentes.